Recreo de curiosidades: cosas del cine

Hoy en el Recreo de curiosidades hemos hablado de cosas del cine, de fantasías hechas realidad y de algunas realidades que no se reflejan bien en la gran pantalla. ¡Cosas del cine!

Desde que existen el cine y las películas hemos visto infinidad de cosas en la pantalla. Nos hemos sorprendido, reído, asustado y, en algunas ocasiones, hemos soñado con tener alguno de los cacharritos, máquinas o tecnología que hemos visto. He tenido la suerte de contar con la colaboración de Grace Turrez Kestell, una de mis estudiantes, que lo ha hecho fenomenal.

¿Qué nos gusta del cine?

¿Qué os gustaría tener de todo lo que aparece en las películas? Lo más solicitado han sido las espadas láser, me incluyo en la petición. Lo siguiente han sido poderes. Por mucho que la ciencia investigue, no vemos del todo claro que nos pueda hacer leer la mente de otro, volvernos invisibles o convertirnos en Magneto. Hemos hablado de la última de Elon Musk. ¡Veremos!

Era el turno de Grace. Nos ha contado unas cuantas cosas del cine.  Sobre tecnología y aparatos que, con algo de tiempo e investigación, se han convertido en realidad.

Cosas del cine (Grace Turrez Kestell)

“Algunos de los aparatos de cine que han pasado de la pantalla a la realidad son estos: 

Los gadgets de James Bond. 

La primera película de James Bond se estrenó en 1962. Hace poco más de sesenta años. Esta película está basada en un libro escrito por Ian Fleming. 

A lo largo de la película, podemos ver varios artilugios. Algunos de ellos son gafas de rayos X para ver a través de las paredes, coches que bucean hasta el fondo del mar, bolígrafos con cámara y demás cosas. Y la mayoría de estas cosas aún no han llegado a la realidad, pero hay algunas que sí. 

Por ejemplo: los jetpacks, los bolígrafos con cámara, el GPS y, por último; los relojes inteligentes. 

Estos últimos han pasado a ser un elemento muy común. Se venden relojes de este tipo a sesenta euros.“

Otro recreista y yo hemos levantado la mano, hemos preguntado por los jetpacks. Grace nos ha explicado que se trata de mochilas con propulsores y que existen en la realidad.

“Los médicos robots de Star Wars

En la película “El imperio Contraataca”, la cual es la segunda película de la trilogía original, un médico robot le curaba las heridas a Luke Skywalker. 

Y hoy en día hay robots que pueden realizar diversas tareas. Algunos son capaces de hacer gimnasia rítmica, otros son capaces de pintar cuadros y algunos son capaces de asistir en operaciones médicas y de curar heridas.”

Se me ha ocurrido que echen un vistazo a lo que hace Boston Dynamics, que a mí me parece una pasada.

“Skype de Metrópolis

La película “Metrópolis” se estrenó en 1927. Está película es de las primeras películas de ciencia ficción y costó 39 millones de dólares. Está ambientada en 2026. Tuvo un gran éxito. Utilizó unos efectos especiales innovadores y mostró el primer robot con forma de humano. En la película vemos muchos otros inventos que se han hecho realidad. Por ejemplo, el robot humanoide y skype.”

Hemos hablado de Asimo y de Nuka, esta última creada para ayudar y acompañar a las personas mayores. ¡Ah! Y de la gran afición que existe en Japón por los robots. 

Un fuerte aplauso ha acompañado a Grace, que se ha sentado a escuchar como yo les destrozaba las ilusiones del cine. No, no os preocupéis, son muy razonables y se han dado cuenta de que son cosas del cine y nos gustan.

Fallos en la gran pantalla

Hackers. ¿Cómo de rápido se hackea un sistema? En las pelis, cualquier hacker entra en las tripas de la CIA, del gobierno o en cualquier banco con dos tecleos, es cuestión de segundos. ¡Ja! Ya quisieran. Para poder hacerlo tienen que haber recopilado información y casi seguro que la habrán robado. Hackear no es cuestión de segundos. 

Cristales. ¿Qué pasa si le das un puñetazo a una ventanilla de un coche? El cine nos enseña que se rompe rápido, sin cortes en las manos y sin dolor. ¿Alguien se lo cree? No, claro que no. El daño que nos haremos será considerable, el cristal se agrietará y, si por casualidad se rompe, los cortes serán considerables.

Golpes, balazos y heridas varias. Protagonistas que, con un tiro en el brazo, o una pierna rota, o un buen golpe en la mandíbula, o una caída desde un cuarto piso, o con todo a la vez, se sacuden un poco el polvo de la ropa y le dan una buena paliza a quien sea. No, no, no, imposible. Les he preguntado cuántas veces faltan a clase por un simple dolor de cabeza o de tripa (miradas cómplices entre los recreistas) y les he dejado pensar… la respuesta clara: imposible aguantar una pelea como las de las películas. Arantza (amiga, profesora y fiel recreista) les ha contado que cuando le rompieron los ligamentos se desmayó del dolor. 

Explosiones de coches. ¿Qué hace falta para que un coche explote? Desde luego un simple disparo no y tampoco caerse por una ladera o dar vueltas de campana. Arder podría, no es fácil, pero ¿explotar? no. Y ¿cuántos coches han visto explotar en películas? ¿Miles?, ¿millones? Alguien ha mencionado Fast & Furious. ¡Puff, incontables!

Cascos de astronautas. En las películas, suele ser habitual que en los paseos espaciales se les pueda ver la cara. En realidad, llevan cascos con protección, por lo que no veríamos nunca su cara. Mis recreistas ya saben que en el espacio hay radiación y que es necesario protegerse de ella. Al fin y al cabo, han viajado a Marte.

Nos duele, pero la ciencia tiene razón

Y hemos llegado al momento doloroso para fans de Star Wars (entre los que me incluyo).

Espadas láser. No son viables. Un recreista ha dicho que alguien había construido una, aunque hemos pensado que sería como las que tenemos, luz dentro de un tubo. ¿Por qué no una espada láser? El láser es luz, no puede limitarse a ser un segmento de un metro de longitud, ni tiene consistencia. Es luz, así que no puede chocar con otra luz como si fuera una espada de metal, de hecho, si alguien ha recibido una bofetada de luz, que nos lo haga saber. 

Imaginad, tengo un puntero láser, otra recreista otro puntero láser y empezamos una lucha, ¿qué ocurriría? Nos hemos reído muchísimo. La conclusión ha sido que acabaríamos las dos sin un rasguño, pero seguramente con daños en la vista. Como la luz no tiene límite de alcance y si cortara, podríamos cortarle la cabeza a alguien en Júpiter, sin malas intenciones. ¡Ah! Y no sonaría. Una de mis recreistas sabía cómo se había hecho el sonido de las espadas, que suena en mi móvil cuando me llega un mensaje. ¡Fan que es una!

Explosiones en el espacio. Uno de mis recreistas sabía que no se oyen. La razón que ha argumentado es que en el espacio no hay aire y el sonido no se trasmite. Cierto, también valdría que hubiera otro medio material, por ejemplo, agua. Aunque nos encante oír las explosiones de Star Wars, en la realidad no se oye ruido en el espacio.

¡Que no se me olvide! Las explosiones tampoco serían como las vemos, no hay oxígeno. En cualquier caso nos da igual, vamos a seguir disfrutando del cine y sus fantasías.

Una pregunta muy curiosa de uno de mis recreistas: “entonces el Big Bang, ¿no se oyó?”

Hasta aquí el Recreo de esta semana. Mil gracias a Grace Turrez Kestell (3ºESO) por colaborar conmigo. La semana que viene: recreistas contra máquinas, ¿quién ganará?

Recomendaciones:

Ver cualquiera de las películas mencionadas y disfrutar.

Reseñas de cine

Star Wars y sus errores científicos

Cómo se hizo el sonido de las espadas láser

En el Recreo de curiosidades anterior:

Diagnóstico: ¿locura?

¿Qué es el Recreo de curiosidades?

Se trata de una actividad donde estudiantes y docentes nos reunimos para charlar, jugar o hacer algún experimento relacionado con la ciencia, la cultura, el arte o cualquier cosa que nos interese. La idea es fomentar la curiosidad y que esté alejado de la rigidez del aula.

La intención es dar pinceladas sobre temas diversos y poder explicar cosas que no se explican en clase, que motiven y que fomenten las ganas de aprender, pensar y tener un espíritu crítico. 

No se trata de apabullarles con grandes conocimientos y conceptos complejos, no. Son pinceladas que les guíen para buscar más, preguntar, interesarse por diferentes áreas y curiosear.

El recreo de curiosidades se realiza en el colegio El Carmen Indautxu (Bilbao) con la colaboración del Hablando de Ciencia.